El secreto de la Constancia

Cómo tener constancia

Importante: este artículo habla sobre la constancia en relación a la actividad de estudiar para conseguir una plaza en la Función Pública (trabajar para el Estado como funcionario) pero lo que se explica aquí es generalizable y se puede aplicar a cualquier otra actividad. Por ejemplo: hacer deporte, aprender un idioma, aprender a tocar un instrumento, seguir una dieta alimentaria, etc.

Quédate con la idea y aplícala a la actividad en la que te interesa tener constancia.

Ojalá te sea útil. Seguro que sí.

Me atrevo a decir que el método es infalible. Si a partir de ahora no tienes constancia en esa actividad que deseas sólo podrá ser por 2 motivos:

  • No aplicas bien el método

  • Te falta tiempo para dedicarle a esa actividad (la solución sería reducir tiempo dedicado a otras actividades para poder dedicárselo a ésta que sí te interesa).

 

La motivación

La motivación es lo que te mueve a hacer algo. Te motiva a la acción para conseguir lo que quieres. En este caso un Título o una Plaza en la Función Pública.

Si estás leyendo esto se presupone que ya la tienes, pero al ser tan importante hay que cuidarla y mantenerla siempre lo más viva e intensa posible.

Pero ¿qué ocurre? Sólo estando motivado no es suficiente. Es necesario estar motivado pero hay otro factor necesario para lograr nuestro objetivo.

Teniendo en cuenta que conseguir una plaza en la Función Pública es un objetivo a medio/largo plazo es necesario que la actividad de estudio se mantenga en el tiempo.

¿Cómo se consigue esto?

 

 

Adicción al estudio

Cuando una persona realiza una actividad (en este caso el estudio) puede realizarla:

  • de manera apropiada
  • de manera inapropiada
  • de cualquier manera…

Muchos, en el caso de prepararse una oposición, están en el segundo y tercer caso.

Ejemplo típico:

Persona que empieza preparándose la oposición muy animada pero que con el paso del tiempo se va desanimando más y más, hasta incluso agobiarse y empieza a tirar de fuerza de voluntad: “tengo que estudiar, tengo que estudiar”… Se fuerza a estudiar pero al final termina dejándolo.

Esta persona ha realizado la actividad de estudio de forma inapropiada.

Y ha obtenido los resultados que ha obtenido.

¿Cómo lo ha hecho? Simplificando, el error básico que ha cometido es no tener en cuenta su Estado (cómo se sentía) durante el estudio.

Dicho más simple, los que abandonan la preparación de la oposición (y no se debe a factores externos) siempre siguen una dinámica de estudio parecida a ésta:

 

Cómo tener constancia

Cómo tener constancia

Progresivamente su Estado durante la preparación de la oposición ha ido cambiando:

Cómo tener constancia

La forma en que ha abordado la preparación de esa oposición le ha provocado una especie de “aversión al estudio”.

Literalmente (con su forma de hacer) ha creado una AVERSIÓN AL ESTUDIO.

Como lo pasa mal cuando estudia, consciente o inconscientemente, en el futuro tenderá a evitar el estudio, hasta abandonarlo.

Entonces, si una persona es capaz de crearse una “aversión al estudio”, ¿también sería capaz de crearse una “adicción al estudio”??

La respuesta es SÍ.

 

 

Bastantes personas tienen alguna adicción, y no suelen ser precisamente buenas, útiles.

Pues ya que tenemos esa capacidad de crear adicciones, creemos adicciones para algo bueno, útil… como en este caso, para “engancharnos” al estudio, lo que nos permitirá conseguir el deseado trabajo.

Y ¿cómo se hace eso?

Pues haciendo “lo contrario”.

Nosotros somos profesionales del estudio, por tanto, sabemos cómo manejar nuestro estado. Si tú quieres que la actividad de estudio se mantenga en el tiempo, o sea, ser constante, HAZ LO SIGUIENTE:

Cómo tener constancia

 

 

Es probable que al principio no tengas muchas ganas de estudiar… pues tu progresión habría de ser algo parecido a esto:

Cómo tener constancia

 

Es decir, si al principio no te apetece mucho estudiar, es muy importante controlar en qué momento/estado terminas la sesión de estudio. Más vale que al principio las sesiones sean más cortas y las acabes bien, tendiendo a quedarte con ganas (hasta que así sea) a que sean más largas y te agobies.

La preparación de una oposición es algo a medio/largo plazo, ya tendrás tiempo y ganas de estudiar. Al principio haz lo que hemos dicho… evita forzarte y/o agobiarte.

Créate las ganas y el estado adecuado.

Si lo haces la actividad de estudio se mantendrá en el tiempo y progresivamente irás obteniendo resultados, lo que todavía mejorará más tu estado y favorecerá que entres en la dinámica de estudiar estando bien y con ganas.

 

CONSTANCIA = voluntad, esfuerzo, empeño

Todo esfuerzo cansa. Por tanto llega un día que la fuerza de voluntad se agota, acaba.

CONSTANCIA = estar motivado y quedarte con ganas de estudiar

Idea clave: si terminas algo bien, sintiendo ganas de continuar… te aseguro que volverás a hacerlo. Así una y otra vez. Serás constante porque dominarás el arte de estar bien y tener ganas

Cómo tener constancia

Simplemente se trata de saber cuál es el momento/estado óptimo para terminar la sesión de estudio. Y hacerlo (cortar el estudio estando con ganas).

Que la persona deje de estudiar, en el 99% de los casos no tiene que ver ni con su capacidad intelectual ni con el tiempo de que dispone. Tiene que ver en CÓMO está mientras estudia y en QUÉ técnicas utiliza al estudiar.

Encontrarás más artículos y consejos como este en mi blog. Como siempre, todas las ideas aparecen allí primero. Hasta pronto! Nos vemos

Enviar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: El contenido está sujeto a derechos de autor y está protegido